Nos asustan los lazos. Nos asusta atarnos pero en cambio, también nos da miedo la soledad. ¿Qué son si no todas esas redes sociales? Matatiempos para sentirse acompañado.
Asistimos a una nueva era. El amor en los tiempos del Tinder. En ocasiones funciona como vía rápida para el sexo fácil. No obstante, a veces se olvida que este tipo de amor pasajero da placer pero no consuelo. La soledad te vuelve a esperar después del clímax. Y el tipo de anoche no se quedará a dormir. Quizás tú te vayas antes de que se despierte. Por eso da miedo ver que hay gente que acepta el reto de estar ahí, de quedarse a desayunar.
Por eso doy miedo.